Mensaje de Nuestra Señora – María Llena de Gracia
El Advenimiento del Nuevo Mundo, Palabras de Nuestra Señora
El Tiempo Final de Preparación para la Purificación de la Humanidad
22 de septiembre de 2013
Queridos hijos, hoy en el día del Señor, con mucho amor y cariño vengo a bendeciros en el Nombre del Padre, del Hijo y del Divino Espíritu Santo.
Unidos a la Santísima Trinidad, vamos juntos a buscar la verdadera Paz para el mundo.
Mis hijos, Mis pequeñitos hijos, el Señor os alerta, El os llama, no os hagáis de rogar.
Echéis fuera el orgullo, humillaos delante de Dios, El os quiere ayudar. La hora es grave y el tiempo cada día se torna menos y vos no tenéis otro refugio que no sea Mi Inmaculado Corazón. Este es el único lugar donde seréis protegidos contra los ataques del demonio. Vos sabéis que él es el enemigo de Dios y también vuestro enemigo. Refugiaos, él desea destruiros y destruir vuestro planeta. Pero, vos tenéis un Refugio seguro que fue os dado por Dios, es Mi Corazón, Soy vuestra Madre Celestial, venid todos a este Refugio, entréis en El sin miedo para protegeros de todos los ataques del enemigo.
Vos sabéis que el demonito está furioso, desea acabar con la familia de Dios que sois vos, todos los hijos que El creó para vivir con El en el Cielo, por toda la eternidad. Dios os llama con verdaderísimo Amor.
Vos fuisteis redimidos con la Sangre de Jesucristo en la Cruz donde El se entregó a muerte por vos, El murió en vuestro lugar y os dio el derecho de la Salvación. Podréis vivir en el Cielo con El por toda la eternidad, así creyendo seréis felices eternamente. El os salvó con Su Sangre. Este es el momento para cada hijo parar, pensar y decidir, pero muchos hijos no quieren meditar sobre este Amor y si no cambian la manera de actuar, ahora, bien de prisa, no conseguiréis más.
La tierra va a temblar, nadie podrá parar para meditar en aquellos días sobre qué hacer, porque será asustador el gran temblor. Es necesario tener coraje para decidir, es urgentísima la necesidad de decisión, ya está comenzando, vos ya no tenéis mucho tiempo más como lo tenías el 21 de septiembre. Hoy ya es un nuevo día que llega trayendo al mundo una respuesta. La Justicia Divina es infalible, el mundo desafió a Dios. Ahora a partir de este día que marca el inicio de terribles acontecimientos en el tiempo para el mundo, vos veréis con vuestros propios ojos lo que un desafío al Cielo provoca en el mundo entero.
En la tierra que viven todos los hijos de Dios, todos vos pecadores y la persecución está detrás de cada uno de vos. Todos vos pecadores estáis en peligro, la persecución es cosa satánica. Pero, vos venceréis, porque Dios vence por vos. Ahora es la hora de todos concientizar que Dios existe, El es el Todopoderoso y con Su Soplo, puede mover de la bóveda celeste un puñado de estrellas, que impactará la tierra dentro de poco tiempo.
La ciencia del hombre no tiene la capacidad para explicar la velocidad del soplo de Dios.
Cuando El alerta a la humanidad con tanta frecuencia, El está dando a ella una oportunidad de reparación de todos los errores. Cuanto más la humanidad erra, peor va quedando, pues el tiempo va quedando más corto también y así la reparación de los pecados cometidos se hace más difícil.
Hay hijos que necesitan de más de 100 años para reparar lo que hicieron errado en cuanto estaban todavía vivos en el mundo. Solamente Dios puede socorreros. Estos necesitan pedir socorro a Dios, día y noche para no perder la Salvación. Las preguntas que El os hace con tantos mensajes son estas: - “¿Qué hicisteis de los talentos que El os dio? ¿Dónde están las enseñanzas que vos recibisteis? ¿Dónde está la vida que El os dio? ¿Dónde está vuestra felicidad, vuestro amor, vuestra justicia, vuestra responsabilidad, vuestra honestidad, vuestra obediencia?” – En verdad Yo os digo, vos intercambiasteis estos por los placeres de la carne.
Cuántos hijos se desviaron hacia los errores, ambición, corrupción, desafíos, vicios, todos los pecados, todo lo que es irrespetuoso a Dios, los hermanos y a ellos mismos. Veáis los peligros, las drogas, robo, hurtos, crímenes, abortos, engaños, golpes sucios, peligrosos, tantas cosas terribles. Veáis hijos todo lo que vos hicisteis y estáis haciendo todavía en contra de Dios y vosotros mismos.
Valoréis vuestra vida, seáis honestos, fieles a Dios, un día muy próximo El os llamará y vos tendréis que rendir cuenta de vuestros actos y entonces llorareis mucho más de lo que podéis imaginar, será un arrepentimiento tardío. Dios os dio una vida la cual debéis cuidar y vos no hicisteis esto, porque vuestra preocupación es sólo con las cosas materiales. Debéis servir solamente a Dios, cuidando de vuestras almas.
El mundo está provocando la Ira de Dios, no Lo estáis respetando. Vos olvidasteis lo que sucedió en Jerusalén, la Sangre y Agua del Sacratísimo Corazón de Jesucristo brotó sobre aquella Cruz donde El fue muerto por culpa de vuestros pecados, para libraros de la muerte eterna. El os dio vida nuevamente y hoy vos, despreciando esta vida, estáis pisando en ella con vuestra rebeldía, vuestra desobediencia a los Mandamientos. Vos estáis con desprecio y desinterés por vuestra vida.
Fue con amor que Dios os creó para ser felices.
Entonces, ahora veréis la tierra temblar, como tembló en aquella hora que mataron a Mi Divino Hijo Jesucristo, Verdadero Dios, Verdadero Hombre. Vos todavía no concientizáis que el Sacrificio que sucedió por culpa de vuestros pecados. Es por esto que el temblor de la tierra será tan grande como la suma de los pecados del mundo.
Meditéis sobre vuestras culpas y arrepentiros, apresuraos en pedir a Dios el perdón de ellas, antes que sea tarde, convertíos, convertidos.
Mis hijitos, la Santa Palabra de Dios os revela hoy sobre el gran peligro en que están todos los pueblos.
Cuando Jesucristo estaba personalmente visible en el mundo, El decía muchas cosas en parábolas, para que los hijos comprendiesen más fácilmente, pero para muchos que allí estaban, no significaba nada porque no tenían la certeza que El era el Mesías Prometido por Dios Padre al mundo. Aquellas palabras eran significativas, eran ejemplos fáciles de comprender, pero los hijos tenían dudas, no se esforzaban para valorar la presencia de El.
Hoy también, el hombre actúa así, porque la mayor parte de la humanidad está impregnada en el barro, queriendo esconderse de Dios y no sale de ello. No pide a El socorro. El hombre piensa que el barro puede esconder sus errores, así piensa también que no morirá porque Dios no lo está viendo y así no lo juzgaría, no lo acusaría de nada.
El mundo piensa que Dios no lo está viendo, no lo condena de ninguna cosa. Pero El ve todo, El es el Verdadero Juez, no comete ningún error. Dios es Justo, no comete ninguna injusticia. El no descuida de Su creación. Por esto no adelante nadie querer huir del mirar de Dios.
Entonces, estéis todos listos. Dios va a secar la tierra y vos quedareis descubiertos, todos sin rumbo, toda vuestra vida quedará expuesta y la pudrición será quemada en el día del Juicio Final.
Escuchéis todos los pueblos, el Soplo de Dios barrerá la paja seca y entonces después brotará la Primavera. Pero antes El derramará sobre los arrepentidos fieles el Agua que santifica, el Divino Espíritu Santo.
La tierra quedará lista para la llegada del Rey. Cuando El venga, será el tiempo de comenzar la limpieza total, la tierra quedara lista para ser transformada.
Brotara la nueva Primavera, será la Tierra Nueva, toda limpia, toda pura, brotara la nueva Primavera, el amor verdadero en los corazones, no habrá más pecado sobre la tierra. Ella ya habrá sido lavada por el Amor del Padre.
El Divino Espíritu Santo ya se habrá derramado sobre todos los convertidos y ellos no cometerán más ningún pecado. Vivirán eternamente. Lo que se pudrió será ya quemado.
Mis hijos, preparaos, vos no sabéis cuánto tiempo os resta, estéis listos, atentos para no perder vuestra Salvación.
Rezad por vuestra alma, que ella no pierda la Felicidad, pedid a Dios que venga a purificaros.
Rezad para que vuestra purificación suceda antes que sea tarde.
Cada día el peligro aumenta más en vez de disminuir, porque el mundo está haciéndose el independiente, el mundo necesita prepararse hasta el día que venga el Señor. Estéis atentos convirtiéndose en todos los instantes. Venid a rezad con buena voluntad.
Esto es lo que vengo a revelaros hoy para vuestra conversión.
No olvidéis que tenéis una vida que recibisteis de Dios. Cuidéis de ella, tendréis que rendir cuentas a Dios si fuisteis cuidadosos o no. Cada hijo tiene que rendir cuentas a El, El es el Creador.
Vos sois criaturas, no adelanta querer ser diferentes. Nadie lo será.
El Padre es Dios, El está por encima de todo lo que existe, no adelanta nadie querer cambiar lo que se determina, vos tenéis que Obedecerlo si quisierais vivir eternamente felices, de lo contrario sólo tendréis infelicidad.
Mis hijos, humillaos y cuidéis de vuestras almas. El día del Señor viene llegando y vos no estáis listos para Recibirlo.
Rezad, rezad, rezad por los dos Santos Padres los Papas Benedicto XVI y Francisco, por todo el Clero, por los religiosos y religiosas, por toda la humanidad.
Rezad por los ateos y paganos, siento gran tristeza en ver algunos de ellos echando hacia atrás, esto significa: tendrán que sufrir mucho dolor, porque no se esforzaron para convertirse por amor.
Rezad por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo, seáis fieles, no os quedéis engañándose a vosotros mismos queriendo esconderos de Dios, porque esto no es posible. Hay hijos que hacen cosas erradas y peligrosas, el pecado escondido de los padres y del mundo, pero Dios está viendo, nada queda encubierto. Toda la verdad será conocida, Dios os mostrará que El ve todo, toda vuestra vida, todo lo que ya hicisteis errado durante vuestra vida en la tierra. Veréis todo antes del último día, será en el día del Aviso.
Humillaos y arrepentíos de todos los pecados cometidos y no pequéis más. Pedid a Dios el perdón con arrepentimiento verdadero. Vos sois la Iglesia de Jesucristo y Ella resplandecerá por toda la eternidad. Ayudéis a los dos Santos Padres los Papas en esta jornada de buscar las ovejas que están distantes de la Iglesia, es necesario que todas regresen, que vengan a buscar protección en esta hora.
Rezad junto con ellos para buscar ayuda para toda la humanidad.
Yo os amo mucho y os cubro con Mi Manto de Amor.
Brasileños, preparaos para las grandes tempestades. Gran peligro se aproxima para Brasil. Muchos trastornos sucederán por motivos de las tempestades. Vientos muy fuertes os impactará.
Todas las naciones preparaos para vencer, no debéis debilitaros por causa del miedo, ni por cosa alguna. Dios está con vosotros, no olvidéis esto, basta que os entreguéis a El vuestras vidas. Deseo a todos los pueblos Mis hijos, mucha paz, alegría y Felicidad Eterna.
Ahora os bendigo en el Nombre del Padre, del Hijo y del Divino Espíritu Santo, la Madre de Jesucristo el Salvador del mundo,
María, la Inmaculada Concepción.
Debéis meditar sobre el Santo Evangelio de hoy: Lucas 16: 1 – 13.
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